Consejos para reducir los efectos del cambio de horario .
- En el caso de los niños, las personas mayores y aquellos especialmente sensibles a los cambios, es importante acostumbrar el cuerpo poco a poco
( aunque ya es un poco tarde para eso). Los días anteriores a un cambio
de hora conviene ir acostándose un poco antes y levantarse más temprano
(en el caso del retraso de octubre), para que la transición no sea tan
brusca. También, comer un poco antes.
- Tras el cambio de hora,
mantener los horarios anteriores al cambio, pero ir ajustándolos un poco
cada día hasta sincronizarlos. Es decir, si tu horario de comida es las
14:00 al retrasar el reloj debes comer a las 13:00, para ir retrasando a
las 13:15, las 13:30, etc. los siguientes días, hasta recuperar el
horario habitual. Lo mismo se aplica al sueño.
- Durante los 4 o 5 días posteriores evitar la siesta, porque interfiere en la sincronización de nuestro cuerpo.
- Hacer ejercicio moderado (pero no antes de acostarse), para favorecer el posterior descanso.
- Reducir la cafeína y las bebidas excitantes.